Una tarjeta de crédito es un dispositivo de pago que ofrecen principalmente los bancos; esta la puedes usar para pagar en miles de tiendas, compañías o establecimientos alrededor del mundo entero.
Ahora que sabes para qué y dónde utilizarla, sigue leyendo y te haré saber cómo funcionan las tarjetas de crédito.
Tarjetas de crédito para compras en tiendas físicas
En la actualidad, la mayoría, por no decir todas las tiendas, aceptan pagos con tarjeta; usualmente las empresas más pequeñas no se unen al principio a esta herramienta por no tener cómo procesar los pagos que requiere; de igual manera, siempre es bueno consultar con el gerente o algún encargado acerca de si aceptan dicho método de pago.
Al momento en el que te dirijas a pagar, es totalmente necesario que muestres tu tarjeta de crédito, esta deberá ser deslizada por el terminal o punto de venta para poder efectuar el pago.
Trata de siempre llevar tu verificación de identidad original contigo, pues muchas tiendas querrán asegurarse de que eres el titular de la tarjeta de crédito que estás entregando.
Ya realizada la compra, tendrás que firmar un voucher, que será el ticket llamado “comprobante de compra”; es completamente recomendable que lo guardes hasta que recibas tu estado de cuenta en el supuesto caso que tengas que certificar algún detalle.
Tarjetas de crédito para compras por internet
Tendrás bastantes comodidades al comprar por internet, ya que no necesitas de tu identificación original, bastará con dar datos específicos de la tarjeta de crédito, como los números que te aparecen en la parte delantera de la tarjeta, el código de seguridad y la fecha de vencimiento; también deberás dar los datos personales con los que se encuentra registrado el titular de la tarjeta, nombre completo y dirección.
Funcionamiento general
En el momento en que realices compras con tu tarjeta de crédito, el banco se encargará de pagar al negocio el monto de tu compra, y más adelante tú tendrás que pagar al banco. Debes recordar siempre que esta es una herramienta de pago a corto plazo.
Debes saber que posees un saldo disponible o efectivo, y una vez que realizas alguna compra, ese pago se descuenta de dicho saldo, hasta convertirse en saldo negativo o saldo a pagar.
Cuando realices nuevamente abonos o reintegro a la tarjeta de crédito, el saldo vuelve a estar disponible, y una vez que agotes el monto estipulado no podrás usarla hasta que lo retribuyas.
¿Qué pasa si no pagas nada?
Si no haces algún pago antes de la fecha límite, deberás pagar por morosidad, con su interés acumulado, mismo que se calcula dependiendo de tu saldo pendiente por pagar.
Cómo recomendación extra, es bueno que sepas organizar tus gastos y controlar los pagos mediante el uso de la tarjeta de crédito; también, procura aportar más del pago mínimo en la fecha que indique el último.
Ahora bien, me parece que ya tienes suficientes conocimientos sobre el funcionamiento de las tarjetas de crédito, así que no tienes excusa para utilizarlas erróneamente.
